En ocasiones, las dificultades para reconocer el origen laboral de un accidente pudieran aparecer antes de acudir a la Mutua.
En caso de que la misma empresa no reconozca la lesión como laboral debemos:
- Desde la representación sindical revisar previamente la forma de actuación prevista en la empresa para atender accidentes de trabajo.
- Notificar siempre cualquier clase de accidente a la empresa y no esperar a que duela al cabo de unos días. Si contamos con testigos del hecho los aportaremos. En caso de accidente in itinere o en misión, el atestado.
Debemos tener en cuenta la importancia de calificar como tal una lesión que tiene origen laboral: Algunas razones son:
- Los datos de siniestralidad presentados no serían reales.
- Eximiría de responsabilidad a la empresa ante futuras consecuencias para la salud de la persona afectada.
- Al producirse la baja por contingencia común es el Sistema Público Sanitario el encargado de pagar la baja y no la Mutua, suponiendo un ahorro para la última y el destino de tales fondos a promocionar la sanidad privada.
- Asi mismo, a nivel externo la derivación de lesiones profesionales a comunes conlleva la amortiguación o maquillaje de las cifras oficales de siniestralidad manejadas.
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